Lorenzo, Ginés y Parladé salvan en parte la tarde en Sevilla

Daniel Luque, que regresaba a la Maestranza tras la Puerta del Príncipe del pasado jueves, pechó con el lote de ‘juampedros’ más deslucido y fue ovacionado tras una actuación firme y valiente.

Regresaba Daniel Luque al coso del Baratillo tras su Puerta del Príncipe del pasado jueves y la pena es que su lote de ‘juampedros’ no le dio opción alguna de reeditar ese triunfo. Hubo temple y suavidad en su capote en el recibo al primero, que enseguida dejó entrever su justeza de fuerza y de vida. A Luque no le quedó otra que mostrarse muy por encima de un toro extremadamente soso al que despachó de una certera estocada. En el cuarto, además, firmeza y valor a raudales del gerenense ante un toro que, como única virtud, se alegró cuando se arrancó al caballo de picar. De hecho, lo brindó Luque al respetable, pero el de Juan Pedro reponía y se quedaba corto, optando el torero por meterse entre sus serios pitones y jugarse los muslos a carta cabal. Otra buena estocada dio pie a una petición no atendida por el palco.

 
El toledano Álvaro Lorenzo se las vio bajo la lluvia ante un primer oponente de pitón izquierdo potable, pero al que le faltó continuidad, despachándolo de pinchazo hondo y un descabello. El quinto, primero de los de Parladé, fue otro cantar con la mala fortuna, eso sí, que el animal se partió por la vaina el pitón izquierdo al rematar en el burladero de matadores. El toro se vino arriba en banderillas y Lorenzo lo brindó al público, citando de lejos desde los medios a lo que el de Parladé respondió galopando y llevándose una voltereta sobre sus pitones que no le amilanó. En la distancia, llegaron dos series de derechazos que hicieron sonar la música y, aunque el trasteo bajó un peldaño cuando el torero citó más en cortó , las bernadinas finales y una estocada casi entera atravesadilla pusieron en su mano la primera oreja de la tarde.
 
Idéntico premio logró Ginés Marín en el que cerro plaza, otro ejemplar de Parladé que salió un puntito rebrincado, otro toro que se pegó un volteretón al clavar los pitones en el albero, y que amagó con rajarse en el quite del caballo. No obstante, tras el brindis de Marín a Enrique ‘El Trola’, el mansito rompió a embestir en la muleta, pidiendo distancia y, a mi modesto entender, los medios, aunque el jerezano se empeñó en torearlo en la querencia, en paralelo a las tablas bajo en tendido 11. faena de altibajos que subió definitivamente sobre la mano zurda y en el remate de bernadinas ligadas a un largo pase de pecho. estocada para el premio de la oreja. En su primero, lo intentó por ambos pitones pero el astado tenía pocas opciones de triunfo, finiquitándolo de dos pinchazos y estocada desprendida.

Ficha del festejo

Real Maestranza de Sevilla: Martes, 3 de mayo. Noveno festejo del abono, séptimo del ciclo continuado de Feria.

Ganadería: Se lidiaron cuatro toros de Juan Pedro Domecq y dos, quinto y sexto de Parladé, el otro hierro de la misma casa ganadera, bien presentados y de escaso juego salvo los dos últimos, que tuvieron más vitalidad en sus embestidas, siendo ovacionados en sus arrastres.

Toreros: Daniel Luque, de blanco y oro, palmas tras petición y ovación con saludos tras petición.

Álvaro Lorenzo, de pizarra y oro, silencio tras aviso y una oreja.

Ginés Marín, de nazareno y oro, silencio y una oreja.

Incidencias: La plaza registró algo más de media entrada en tarde de lluvia durante los tres primeros toros.

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